Cereza

'Cherry' de Lana Del Rey es una exploración conmovedora de las complejidades del amor, yuxtaponiendo su dulzura con el potencial de destrucción. Conocida por su estilo cinematográfico y sus temas melancólicos, Del Rey a menudo profundiza en el lado más oscuro del romance, y 'Cherry' no es una excepción. La letra de la canción pinta una imagen de un amor tan intenso que raya en lo peligroso, evocando una sensación de vulnerabilidad y caos que viene con profundas conexiones emocionales.

La repetida frase 'Me hago pedazos cuando estoy contigo' captura la esencia de perderse completamente en otra persona. La metáfora de 'cerezas y vino, romero y tomillo' sugiere una experiencia sensorial rica que es a la vez embriagadora y potencialmente abrumadora. Estos elementos, tradicionalmente asociados con la dulzura y el placer, se contrastan con la idea de estar 'arruinado', lo que indica que la relación trae tanto éxtasis como devastación. El uso que hace Del Rey de exclamaciones religiosas como '¿Puedo escuchar un maldito aleluya?' agrega una capa de sacrilegio, insinuando la naturaleza pecaminosa y prohibida del amor que describe.



yo yo mismo letras

Las imágenes de la canción de un jardín de rosas incendiado y playas negras en ruinas ilustran aún más el poder destructivo de este amor. Las 'escenas de celuloide desgarradas' sugieren un romance perfecto, parecido a una película, que ha sido dañado, reflejando la desilusión que puede surgir con las relaciones de la vida real. La entrega emotiva de Del Rey y la crudeza de la letra, intercalada con improperios, transmiten una sensación de urgencia y pasión. 'Cherry' es un testimonio de la dualidad del amor, donde lo que trae alegría también puede traer dolor, y Del Rey captura magistralmente esta dicotomía en su música.