'Fairytale' de Alexander Rybak es una canción que captura la naturaleza agridulce de una relación romántica pasada a través de la metáfora de un cuento de hadas. La canción comienza con una mirada nostálgica a un amor juvenil, uno que era puro y parecía destinado, muy parecido a las historias que escuchamos cuando éramos niños. El cantante recuerda a una chica que alguna vez conoció y amó, lo que indica una conexión profunda que desde entonces se ha convertido en un recuerdo preciado. El uso del tiempo pasado sugiere que este amor ya no está presente, preparando el escenario para una historia de amor perdido.
El estribillo de 'Fairytale' revela un estado emocional complejo. Rybak confiesa estar enamorado del aspecto de cuento de hadas de la relación, a pesar del dolor que le produce. Esto sugiere un anhelo por la versión idealizada del amor que suelen representar los cuentos de hadas, lo que contrasta marcadamente con la realidad de su situación. La línea 'No me importa si pierdo la cabeza, ya estoy maldito' indica una voluntad de abrazar la locura del amor, reconociendo que ya está profundamente afectado por su pérdida. El cuento de hadas, en este caso, es a la vez un sueño y una maldición, algo hermoso pero inalcanzable.
A medida que avanza la canción, Rybak describe la naturaleza tumultuosa de la relación, con sus altibajos, amor y conflicto. La montaña rusa emocional es indicativa de relaciones apasionadas que pueden al mismo tiempo elevar y devastar. Los versos finales expresan un sentimiento de arrepentimiento y un anhelo de volver a conectarse con el amor perdido. El cuento de hadas del que está enamorado no es sólo el amor idealizado, sino también la esperanza de un nuevo comienzo con la chica que no puede olvidar. 'Fairytale' de Rybak es una conmovedora reflexión sobre el poder duradero del amor y el dolor de su ausencia, envuelto en el encanto atemporal de los cuentos de hadas.